Unos se salvaran y otros se joderan. El gobierno federal anunció un plan para ayudar a unos 4 millones de personas a mantener sus hogares, pero la medida ofrece poca asistencia a quienes han perdido partes importantes de sus ingresos.
Tampoco sirve mucho a quienes deben más que el valor de su casa con hipotecas de más de $729.750 dolares. Si tiene semejante deuda pues apunte para otro lado porque no se le dara ayuda al no ser elegible para ese plan.
En lugares como Florida, Las Vegas, Phoenix o California donde el valor de las viviendas ha caído de un 30 a un 40 por ciento, el plan deja a muchos en viviendas que no pueden afrontar, algunos debido a que se endeudaron imprudentemente y otros debido a que fueron castigados por los vaivenes del mercado. A esa gente se lo llevara el diablo prendio en candela, guayyyy.
J.P. Morgan dijo que aproximadamente el 20 por ciento de los 50 millones de deudores hipotecarios deben más del 105 por ciento del valor de sus viviendas y, por lo tanto no reúnen las calificaciones para solicitar el plan de refinanciación. Que pena debe de dar. Muchos haciendo cocote con este plan y se quedaran fuera.
Christopher J. Mayer, profesor de bienes raíces en la escuela de Negocios de la Universidad de Columbia, dijo que “la parte de refinanciación del plan está organizada de una manera que brinda menos ayuda a quienes más la necesitan”.
Agregó que “estamos perdiendo la oportunidad de ayudar a muchas más personas”.
La refinanciación es solo para las hipotecas propiedad de o garantizadas por Fannie Mae y Freddie Mac, o sea aproximadamente la mitad de los hogares. Los propietarios pueden saber cual de esas agencias tienen o garantizan sus préstamos llamando a sus compañías hipotecarias.
En el caso de otros deudores el gobierno da subsidios a prestamistas que modifiquen los planes de pago, pero solo en préstamos inferiores a $729.750.
El Departamento del Tesoro estima que un 2 por ciento de las hipotecas supera ese límite.
Bill Apgar, asesor principal en el Departamento de Viviendas y Desarrollo Urbano, dijo que “el programa hizo sus elecciones. A fin de tener los recursos disponibles para ayudar a la mayor cantidad de gente, se decidió limitar la ayuda a quienes tienen una capacidad de ajuste superior al promedio”.
Quienes elaboraron el plan estiman que de un 20 a un 30 por ciento de las personas cuyos préstamos sean modificados caerán nuevamente en atrasos en los pagos.
Por su parte J.P.Morgan estima que el plan de modificación de préstamos evitará entre 60,000 y 2.6 millones de ejecuciones hipotecarias, dependiendo de cuan liberalmente os bancos modifiquen las hipotecas y cuantos deudores vuelvan a dejar de pagar.
Paul Willen, asesor económico en el Banco de la Reserva Federal de Boston, dijo que hay otro grupo que no será ayudado por el plan: los que recientemente han perdido sus empleos. Los desempleados estaran frito lay porque ahora mas que nunca necesitaban una manita con las deudeas hipotecarias.
Debido a que los precios de las viviendas siguen bajos, incluso después de que la economía comienza a recuperarse, las tasas elevadas de ejecuciones hipotecarias probablemente continuarán incluso después de que los bancos y los empleos se estabilicen.
Fuente: Diario Las Americas.com
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