El gobernador Nathan Deal por el estado de Georgia promulgó la ley anti-imigrante HB87

"Este es un momento histórico para Georgia", dijo el gobernador Nathan Deal tras firmar este viernes la medida antiinmigrante HB87. Mientras tanto, afuera de la oficina de Deal, manifestantes coreaban "Shame on you!" (¡qué vergüenza!).

El gobernador manifestó que esta ley es una respuesta a la falta de acción del gobierno federal y servirá para proteger a los contribuyentes del estado.

Matt Ramsey, autor de la HB87, declaró por su parte que esta legislación "aguantará cualquier procedimiento legal en su contra, porque es diferente a la de Arizona".

Deal promulgó el polémico proyecto al mediodía de este viernes y estuvo acompañado por varios legisladores republicanos, entre ellos Ramsey y Chip Rogers, líder de la mayoría en el Senado estatal.

Grupos defensores de los inmigrantes, entre ellos la Asociación de Funcionarios Latinos Electos de Georgia (GALEO), están instando a la comunidad a movilizarse pacíficamente frente al Capitolio para protestar contra la nueva ley.

El director ejecutivo de GALEO, Jerry González, dijo a través de un comunicado que hoy es un "día negro" en la historia de estado. González lamentó que los esfuerzos para convencer a Deal de que vetara la medida fueron infructuosos.

El activista, sin embargo, instó a la comunidad a mantener la calma y a no tomar decisiones apresuradas en este momento.

“Necesitamos mantener la calma y tomar decisiones racionales, no basadas en el miedo o la emoción. La HB87 no será implementada hasta el 1 de julio y esperamos demandas similares a las que ocurrieron en Arizona y Utah”, afirmó González.

Algunas de las cláusulas más polémicas de la HB87 entrarán en vigor el 1 de julio.

“Hoy es un día negro para Georgia, pero en medio de la oscuridad, nos mantendremos en la luz y pronto vendrá un nuevo día para nuestro estado”, añadió.

Por su parte, Adelina Nicholls, directora de la Alianza Latina Pro Derechos Humanos de Georgia (GLAHR), dijo que esta acción del gobernador "no es solo un insulto a la comunidad latina y a otros inmigrantes, pero es también un ejercicio de política barata que le costará enormemente a nuestro estado".

"Este no es el fin, solo el comienzo de una nueva etapa. Esta ley debe ser combatida y puede y será derrotada”, afirmó.