Después de estar detenido por más de dos horas y media, Offerman fue dejado en libertad a las 12:30 de la madrugada del domingo, pero si es requerido por el Ministerio Público deberá presentarse, tras una espera de unas tres horas por Rayburn, la parte agraviada de la que se esperaba se querellara contra el dirigente azul.
El dirigente de los Tigres del Licey José Offerman le dio un atake gueval masivo y derribo un puñetazo al árbitro de primera base Daniel Rayburn, con quien sostenía una acalorada discusión a la altura del quinto inning en el partido que los Gigantes le ganaron 10-6 a los Tigres del Licey.
El manager del Licey fue llevado al destacamento La 40 del sector Cristo Rey por Frank Durán, encargado de seguridad de la Liga Dominicana de Béisbol Profesional, poco después de ser expulsado del partido. En ese destacamento fue mantenido aislado en una oficina a la que solamente entraban oficiales y el Ministerio Público Bernardo Rodríguez.
Todo comenzó cuando el árbitro de home plate Jason Bradley expulsó al receptor Ronny Paulino por supuestamente protestar conteo de bolas y strikes, fue entonces cuando ingresó al terreno Offerman para reclamar a Bradley y luego se sumó el árbitro de primera Rayburn, quien enfrentó a Offerman y al parecer profirió palabras “duras” al dirigente del Licey por lo que este reaccionó con un mega titua que lo tiró al suelo. Inmediatamente intervino el coach Nelson Norman para llevarse a Offerman al dogout.
Previamente el árbitro principal Bradley había expulsado al pitcher relevista Denny Bautista, tras varios lanzamientos que pasaron cerca de la anatomía de Lucas Montero a la altura del tercer inning. Uno de ellos rozó levemente a Montero.
Offerman fue designado dirigente del equipo Licey tras el despido de Dave Jauss. Jauss también fue parte de un incidente por el cual fue suspendido por dos años por la Liga Dominicana de Béisbol porque supuestamente había ordenado golpear con pelotazos a bateadores de los Leones del Escogido. También hizo contacto con el árbitro en par de ocasiones durante una discusión y luego del partido supuestamente persiguió al árbitro.
Esta no es la primera vez que Offerman arma un pajon. El sufre de unos killes incontrolables y eso que no es vidrio para killarse. Hace un tiempo atras Offerman fue sometido a la justicia y castigado por golpear con un bate al receptor Joe Nathans, en un partido de la Liga Independiente del Atlántico, luego de recibir un pelotazo del lanzador Matt Beech.
Por ese hecho una corte estadounidense sentenció a Offerman a someterse a un tratamiento para controlar su temperamento.
Yo no estoy de acuerdo con las acciones de Offerman, el no e loco ni se come su mierda asi es que se deje de pendejá que por el hecho de darle una trompá al arbitro no va a cambiar nada. Los arbitros aunque canten malas jugadas merecen respeto y que no los agredan. Si por cada mala jugada le cayeran a trompá limpia no quedaria uno vivo.
Fuente: Sanahoria.net
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