

La Cámara de Representantes estadounidense aprobó este domingo una histórica reforma al sistema de salud, que entre otras cosas prohibirá a los seguros médicos negarse a cubrir pacientes por condiciones médicas previas, abandonar a pacientes con enfermedades crónicas o catastróficas, y que le extiende seguro médico a más de 30 millones de estadounidenses y reduce el déficit gubernamental en más de $1 billón en 20 años.
Ha sido una meta de varios presidentes, se ha traducido en ácidas luchas partidistas y ha implicado la ganancia y pérdida de enorme capital político en Washington, pero sólo bajo el mandato de Barack Obama y el liderazgo demócrata de Nancy Pelosi (D-CA) y Harry Reid (D-NV), el criticado sistema sanitario de Estados Unidos posee ahora una legislación concreta que lo modificará de manera sustantiva.
La aprobación representa un fuerte respaldo para el presidente estadounidense Barack Obama, que ha apostado su prestigio político al éxito de la propuesta.
Obama se anoto un virao y a la vez hizo historia porque ningún presidente estadounidense que lo intentara habia tenido éxito en lograr una reforma del sistema de salud, basado en la contratación de seguros médicos privados.
Fue un largo día en el Capitolio. Desde las primeras horas de la mañana comenzaron las reuniones, las llamadas y conversaciones de pasillo, (los favorictos, los chelitos ofrecidos) en búsqueda de los últimos votos necesarios para aprobar la legislación. Un esfuerzo que se prolongó hasta la tarde y que desembocó en un voto efectuado a las 10:45 de la noche.
Gran cosa chichu que los republicanos no apoyaran la reforma de la salud porque de todos modos fue aprobada sin un miserable voto de los republicanos. Los democratas siguen dominando en el congreso pa que alusen que no hay foco.
Fuente: Terra.com
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